lunes, 24 de diciembre de 2012

"Navidad Robada..."

Cada día que pasa se torna más indolente en términos de las actuales atrocidades que está viviendo la cada vez más desgastada sociedad.

Anualmente llega esta temportada en donde la gente "enloquece" comprando infinidades de artilugios para decorar el sitio donde viva.

Hay aires de algún tipo de esperanza, pero no se ve claramente la llegada de ésta.

Enciendes en televisor y ves que del otro lado del Atlántico los titulares dominantes sólo enfocan violencia, hambruna y desigualdad.

Buscando algo acorde con la época, se busca entonces otro tipo de noticia en los medios tradicionales, mas el hecho se repite nueva vez. Dándole largas al asunto nos auxiliamos de la Internet y cual si fuese un CD en "repeat", aparece lo mismo inclusive, ¡más gráfico!.

Fue entonces cuando decidí salir a caminar y vi a los tradicionales vendedores de manzanas, uvas, peras y diversas golosinas. Sus rostros llenos de buena cara, combinaban junto a esa lúcida mirada, una abierta intención de convencer a su potencial cliente que se lleve algo, pero no pasa nada...

Al mirar en 360 grados, la competencia es demasiado agresiva y dificulta la toma de decisión cuando en ambos extremos de las calles ves prácticamente lo mismo. La llegada de los grandes centros, arroparon las aspiraciones del vendedor callejero.

Más abajo sigo caminando y veo una escena bastante clásica: la jugada del dominó, el consumo de bebidas espirituosas y una música bastante alta. Gente riendo y vociferándose entre sí, diseminados en las aceras en toda su extensión impidiendo el libre paso del peatón.

El recorrido parece un Déjà vu visual constante al pasar de un bloque a otro. Los niños ya hace rato que dejaron de serlo y apenas se detecta un destello de lo que fue su inocencia. Su mirada es más desafiante que educada y su accionar, deprimente y bastante penoso.

Siguiendo el paseo, de repente pasan vehículos llenos de las famosas canastas dadas por políticos que serán irremediablemente mal distribuidas, dado el caos colectivo que siempre se adueña de las delirantes almas congregadas allí.

Por fin llego a mi destino. Hago entrega a una monja de una aceptable cantidad de pan, algunas frutas y jugos en cartón. Su reacción al ver mi rostro se divide entre el agradecimiento y la curiosidad. En eso, se nos une el padre regentor del lugar.

Con suma humildad agradece el gesto de nuestro obsequio a los olvidados envejecientes y detectando una honda mirada triste le pregunté:

-"Padre: ¿A dónde se llevaron la Navidad?..."

Por: Marcos Sánchez. Cuentos Sociales: "Navidad Robada". © 2010-2012 Marcos Sánchez. Derechos reservados.

viernes, 7 de diciembre de 2012

"Reconocimiento Público"

Existe una condición social que alberga dentro de todo ser humano en este planeta o por lo menos, en un gran porcentaje de todo el que habita este globo terráqueo. Se podría considerar algo inherente porque su práctica está presente en casi todas las etapas del desarrollo personal.

Me refiero a ese incesante deseo de reconocimiento público. Muchas veces se realiza algo en espera que se tome en cuenta y cuando esto no sucede, sentimos rechazo y desprecio. Es algo bien complejo ya que el instinto nos dice si en realidad el mérito era imperativo, pero pocos gozan y les es difícil reconocer el éxito del prójimo.

Debemos entender que no siempre las cosas resultarán como uno desea. Coaccionar las situaciones arrojará resultados nefastos y para nadie es un secreto que las exageraciones, también concluyen de forma desagradable. El asunto es que nos resulta incómodo pasar inadvertidos.

En la combustible vida diaria nos topamos con historias únicas. Muchas de ellas envolventes y varias otras, inexplicables. Cada quien tiene una misión y el plan final está marcado en consumar un bienestar espiritual, no obstante no estamos diseñados para estar solos y nos corroe el deseo que se sepa cómo estamos aún siendo mentira.

Gracias al agitado curso de vida actual, el contacto humano está mermando a un ritmo extraordinario y todo se le quiere dejar a la tecnología. Lo curioso del caso es que la llegada de esas facilidades para uno comunicarse, ha incrementado una frenética proyección en búsqueda de ese espaldarazo...

-¡"Ofrézcome mi hermano cuánto tiempo! ¡Para verlo a usted hay que hacer cita!"

-"No me digas eso que sabes no es cierto. Yo siempre estoy abierto para los encuentros y tú lo sabes"

-"Lo sé Teacher lo que pasa es que con tantas cosas en la cabeza, uno como que se desconecta"

-"En el buen sentido de la palabra, a veces no está nada mal el desconectarse. Hay que tomarse un tiempo para reflexionar sobre cómo lidiar con esas cosas que dices"

-"Usted siempre con buenas respuestas Marcos jejeje ¡debiste haber sido Pastor! ¡ay mi madre cuánto cuartos jajaja!"

-"No relajes con eso. Muchas personas me lo han dicho, pero sabes que jamás haría algo así"

-"Es broma, yo sé que usted se maneja de otra forma, pero (suspira en gesto de lamento) uno ve tanta gente que no se merece nada con todo y otros fajadores partiéndose el lomo cogiendo lucha... ¡la vida es una vaina Teacher!"

-"Bueno, quizás digas que quiero llevarte la contraria, pero yo lo veo como algo interpretativo. Muchos de esos que dices que lo tienen todo, en realidad andan en busca de afecto"

-"¿Cómo así? mire que nunca le he adversado, ¡pero usted sabe la cantidad de gente compadre que yo veo en redes sociales con una bonanza que le sale por los poros!"

-"Jajaja dos cosas que tendré que aclararte: no pienses que adversar a alguien está mal, siempre y cuando sea un debate justo y elevado, ¿OK?. Lo otro es que en las redes sociales se vende mucho pantalleo que casi siempre no se corresponde con la realidad"

-"¡A ver explíqueme esta paradoja que acaba de meterme en la sesera Teacher! ¿Entonces quiere usted decir que todo lo que se publica es un montaje?"

-"En cierta forma sí jejeje aunque toda regla tiene su excepción amigo mío. Verás, cuando alguien publica con insistencia mensajes de bonanza personal no es más que un desahogo ante su inconformidad existencial y a la vez, un llamado subliminal a la multitud gritando: ¡Hey estoy aquí, háganme caso!"

-"¿Será posible Virgen de la Altagracia...?"

-"No vayas a entrar en pánico jejeje lo que pasa es que como personas, necesitamos de atención, de un abrazo, que se nos diga algo y la llegada de las redes sociales ha permitido que miles de personas se desinhiban en forma electrónica porque en vivo jamás se atreverían"

-"De acuerdo con usted"

-¿No ves lo fácil que te dicen 'mi amor' u otras frases que generalmente no escuchas en persona?

-"...es verdad... ¿y por qué es tan difícil vendernos como somos?"

-"¡Exacto! ¡Ésa es la clave! ¿Para qué publicar que estoy full de trabajo cuando en realidad estoy desempleado?, ¿Por qué publicamos fotos vendiendo lo que no somos?, ¿Qué perseguimos con decir que pasamos un fin de semana espectacular cuando en realidad estábamos enfermos?"

-"...porque necesitamos que nos presten atención..."

-"¡Vuelve usted a dar en el clavo! No está mal que cada quien aspire a una mejor vida, eso le asiste a todo ser humano. Lo que pasa es que publicamos fotos con costosas bebidas y ropa llamativa cuando en la mesa de sus casas los platos están vacíos; enseñamos el carro nuevo debiéndole el alma al prestamista o una imagen de felicidad cuando en verdad cerramos las puertas y cada quien coge para su lado"

-"...no me malinterprete, pero me siento un poco mal... no con usted, sino con... o sea y los que publican sobre felicidad espiritual y esas cosas..."

-"No pierdas la objetividad. Te dije que no es una regla absoluta y que la misma tiene sus excepciones. La gente interpreta lo que ve a su manera. El que es puro de corazón se lo ves en el acto. Si lo que te preocupa es que tienes amistades que siguen los pasos de Dios y lo que te he dicho te ha puesto a pensar, entonces sus vidas espirituales necesitan reorientación"

-"¿Qué estas haciendo?" le pregunté al momento de mostrarme de su tablet sus álbumes de fotos

-"Bueno jejeje aquí hay suficientes fotos como para publicar una exposición mensual jejeje ¿qué en sí me quieres mostrar?"

-"¿Cuáles de esas cree usted debo borrar?"

-"Esa decisión la debes tomar tú amigo. No me reuní contigo para dictarte los pasos de tu vida. Simplemente te he ilustrado sobre aspectos de la misma. Cuando llegues a tu casa analiza en tu interior las que son reales y ésas son las que se quedarán"

Le pedí que se levantara y le dí un fuerte abrazo que casi le saco la respiración al momento de preguntarle: -"¿Qué se siente?"

-"Un alivio inexplicable...que le importo a alguien... ¡Hey! gracias por ser mi amigo! ¡¿Nos tomamos una foto?!"

-"Muy bien jejeje a propósito: ¿Qué clase de foto será ésta?"

-"¡Esta será de las que se van a quedar!"

Muchas veces buscamos el afecto teniéndolo justo al frente nuestro. Lo que pasa es que está tan cerca que apenas nos damos cuenta...

Por: Marcos Sánchez. Cuentos Sociales: "Reconocimiento Público". © 2012 Marcos Sánchez. Todos los derechos reservados.